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Geología
Es muy importante analizar la información
geológica y litológica de las imágenes para poder comprender las
fotografías y el pasado geológico del territorio. La fotointerpretación
de la geología de un terreno o fotogeología es una ciencia muy útil que
permite extraer una gran cantidad de información de cada imagen. La
escala de las fotos es ideal para el geólogo y esto le permite
identificar las principales estructuras geológicas, las unidades
litológicas, trazar la posición de los ejes sinclinales y anticlinales
con gran exactitud, detectar los pliegues, conocer la erosión, analizar
afloramientos y yacimientos minerales...
La fotointerpretación geológica no es una
tarea sencilla (y en algunos casos debe ser contrastada con trabajos de
campo, con mapas geológicos y topográficos o con bibliografía del área)
aunque con experiencia y conocimientos es posible deducir las
estructuras geológicas más importantes.
Las claves para la fotointerpretación de la
litología que muestra la foto está en observar el color de los
materiales, buscar afloramientos de rocas, ver la fracturación de la
roca (por ejemplo, el granito presentará un alto grado de fracturación,
igual que el gneis, las cuarcitas, etc., mientras que arcillas, arenas,
yesos, etc., tiene un grado de fracturación mucho mas bajo), las
texturas, las formas del terreno, las redes de drenaje y las
estructuras geológicas asociada a cada tipo de roca. Además, es
necesario tener en cuenta otros factores no geológicos como el clima,
la estación del año, la hidrografía, la vegetación...
En fotogeología se pueden detectar los
siguientes tipos de rocas:
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| Rocas ígneas |
Plutónicas |
Granitos
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| Volcánicas |
Basaltos, riolitas, ignimbritas, traquitas,
lavas, tobas... |
| Rocas
metamórficas |
Mármoles,
cuarcitas, pizarras, esquistos, gneises... |
| Rocas sedimentarias y sedimentos |
De
origen detrítico |
Conglomerados, areniscas, arenas, arcosas,
lutitas, limonitas, arcillitas, limos, arcillas, margas... |
| De
origen químico |
Calizas, yesos, sales...
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| De
origen orgánico |
Carbón |
| Tipos de
rocas. |
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Rocas
Ígneas
Se forman cuando el magma (roca fundida)
se enfría y se solidifica. Se dividen en dos grupos: las rocas plutónicas o intrusivas
que se forman cuando el magma se enfría lentamente bajo la superficie;
y las rocas volcánicas o
extrusivas que se forma cuando el magma se enfría
rápidamente sobre la superficie, por ejemplo, tras una erupción
volcánica.
- Rocas Plutónicas:
son rocas de origen intrusivo, de composición ácida o básica, y todas
desarrollan una morfología, drenaje y textura similares. Normalmente
todas las rocas ígneas muestran una red de drenaje externa espaciada y
bien desarrollada, frecuentemente controlada por una red de diaclasas y
fallas. Se caracterizan por la ausencia de estratificación, su
textura homogénea y gruesa, y porque sobre ellas la distribución de la
vegetación es muy uniforme.
En general, es fácil distinguir a las rocas plutónicas de las rocas
volcánicas, sedimentarias y metamórficas, aunque es difícil distinguir
una roca plutónica de otra. Es fácil diferenciar un granito de una
caliza pero es difícil distinguir un granito de un gabro, una sienita,
o una diorita. Normalmente la clave para diferenciar los distintos
grupos de rocas plutónicas está principalmente en el tono y el color.
Granito:
es la roca y el tipo de relieve más sencillo de identificar (aunque a
veces puede confundirse con el gneis o con otras rocas ígneas). Su
aspecto rugoso y granulado, y su color grisáceo (de tono medio) es muy
característico. Suele aparecer formando masas homogéneas y uniformes o
en forma de bloques, cantos, lomas suaves, dorsos de ballena...
generalmente en relieves redondeados y nunca con aristas ni crestas muy
puntiagudas.
Los granitos se asocian a formas de drenaje de control estructural con
redes rectangulares, radiales, angulares (en granitos muy fracturados,
diaclasados, y con muchas fracturas y fallas entrecruzadas) o con
drenajes dendríticos (en áreas muy erosionadas con suelos arenosos de
tonos claros).
En terrenos graníticos se suelen observar áreas en donde el suelo está
mas evolucionado y donde suele haber una vegetación densa con árboles o
arbustos, y áreas en donde la roca madre aparece en la superficie y
evita el desarrollo de la vegetación.
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Granitos en la Peña de El Yelmo en la Pedriza (Manzanares de El Real,
Madrid).
Imagen del PNOA © Instituto Geográfico Nacional de España.
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- Rocas
volcánicas: aparecen en lugares donde el magma sale o ha
salido directamente desde el interior de la Tierra hasta la superficie
terrestre. Se caracterizan por su morfología, la presencia de
estructuras de flujo y de cierta alternancia o bandeado, y su textura
comúnmente moteada y poco uniforme. Además, las rocas efusivas suelen
ser porosas y permeables y, por lo tanto, no muestran una red drenaje
bien definida, aunque esto depende de la edad de los materiales y del
clima.
Basaltos:
estas rocas suelen estar asociadas a relieve abruptos, muestran un tono
gris oscuro o negro en la fotografía aérea, una textura moteada y a
veces, rasgos de flujo. Normalmente la superficie suele aparecer
cubierta de manchas de tono gris claro, reflejando meteorización o
alteración hidrotermal. Los basaltos en climas áridos o húmedos
soportan generalmente poca vegetación; sin embargo, en ambientes
tropicales las rocas basálticas están cubiertas por una densa
vegetación y suelos aptos para cultivos.
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Basaltos en la Punta de Ánaga (Santa Cruz de Tenerife).
Imagen del PNOA © Instituto Geográfico Nacional de España.
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Efusivas
ácidas (riolitas, ignimbritas, traquitas): aunque su tono
es parecido al del granito, la textura es más lisa. En las rocas
efusivas ácidas la red de drenaje es irregular, a veces dendrítico o
angular, con cabeceras en forma de pinza. Hay menos indicios claros de
estructuras de flujo que en los basaltos y normalmente se observa una
leve estratificación debida a bandas de rocas piroclásticas
intercaladas.
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Riolitas en el Puntazo de Piedra Negra en Rodalquilar (Almería).
Simbología: en línea roja se marca el límite de los materiales; An:
Andesita;
Ca: Calcarenita; y C: Calizas.
Imagen del PNOA © Instituto Geográfico Nacional de España.
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Lavas:
son materiales de color rojizo o marrón en donde se suele apreciar
fácilmente el sentido de flujo de la lava.
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Cráter del Teide (La Orotava, Santa Cruz de Tenerife).
Simbología: en línea roja se marca el límite de los materiales; las
flechas rojas
indica el sentido de la lava; Co: Coladas recientes; y L: Lavas.
Imagen del PNOA © Instituto Geográfico Nacional de España.
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Rocas
piroclásticas (tobas volcánicas): son rocas muy variables,
pueden formar rocas consolidadas o no consolidadas, friables o masivas,
de grano fino a grueso, de colores variados (aunque siempre claros) y
de composición muy variada. Están asociadas a redes de drenaje densas
y de textura uniforme. La cubierta vegetal depende generalmente del
clima. En ambientes tropicales, las áreas de rocas tobáceas son
fértiles y muestran una vegetación densa; mientras que en las áreas
áridas, forman serranías agudas y abruptas que sostienen poca
vegetación.
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Piroclastos en la Montaña Blanca (La Orotava, Santa Cruz de Tenerife).
Simbología: en línea roja se marca el límite de los materiales; Pir:
Piroclastos; y L: Lavas.
Imagen del PNOA © Instituto Geográfico Nacional de España.
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Continúa en la siguiente
página con las rocas
metamórficas...
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